Las mujeres rurales, indígenas y afrodescendientes de Ecuador y América Latina son las
verdaderas guardianas de la naturaleza, quienes con sus conocimientos ancestrales y su
dedicación han protegido la biodiversidad, asegurado la seguridad alimentaria y liderado la
lucha por un futuro sostenible. Ellas representan aproximadamente una cuarta parte de la
población mundial y desempeñan un rol indispensable en la producción de alimentos, el
cuidado del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático.


El Empoderamiento de las Mujeres Rurales: Clave para el Futuro Sostenible


Lograr la igualdad de género y empoderar a las mujeres rurales no es solo una cuestión de
justicia, sino también una estrategia clave para combatir la pobreza extrema, el hambre y los
efectos devastadores del cambio climático. Ellas producen la mitad del sustento alimenticio
mundial y, gracias a su sabiduría ancestral y prácticas agrícolas sostenibles, son capaces de
adaptarse a los retos del calentamiento global. Ejemplos de su liderazgo incluyen el uso de
semillas resistentes a la sequía, la reforestación y la regeneración de suelos dañados. Estas
mujeres son pioneras en la resiliencia climática.


Mujeres Rurales: Agentes de Cambio en la Crisis Climática


Frente al calentamiento global, las mujeres rurales no solo enfrentan grandes desafíos, sino
que también se posicionan como agentes de cambio. Desde los campos de cultivo hasta los
espacios de liderazgo comunitario, ellas diseñan e implementan soluciones basadas en su
conocimiento del territorio, desarrollando estrategias de adaptación que incluyen prácticas
como la agroecología y la preservación de la biodiversidad. Al integrar sus conocimientos con
nuevas tecnologías, lideran la lucha contra el cambio climático y protegen sus comunidades
para las generaciones presentes y futuras.
Sin embargo, estas mujeres también son las más afectadas por los efectos del cambio
climático. Las mujeres indígenas, afrodescendientes y campesinas, que dependen de la
agricultura para su sustento, están expuestas de manera desproporcionada a los cambios
climáticos extremos, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Esta situación agrava las
desigualdades ya existentes, privándolas de acceso a recursos básicos como agua, tierra y
servicios esenciales.


Un Llamado a la Acción: Promover su Liderazgo


Es urgente cambiar el paradigma. Este Día Internacional de las Mujeres Rurales, celebrado bajo
el lema «Mujeres rurales como sostenedoras de la naturaleza para nuestro futuro colectivo»,
nos recuerda la importancia de construir resiliencia climática, conservar la biodiversidad y
garantizar que las mujeres rurales tengan una participación activa en la toma de decisiones
dentro de sus comunidades. Su rol como proveedoras de alimentos y protectoras del medio
ambiente debe ser reconocido y apoyado.

Para lograrlo, es esencial garantizar que las mujeres rurales tengan acceso a las mismas
oportunidades que los hombres. Esto implica asegurar que puedan acceder a recursos como la
tierra, la educación, la tecnología y el financiamiento, así como incluirlas en la planificación y
desarrollo de políticas públicas. Solo así podremos avanzar hacia una sociedad más justa y
equitativa, donde el trabajo y la sabiduría de las mujeres rurales sean reconocidos como
elementos esenciales para un futuro sostenible.

En un contexto donde las desigualdades estructurales afectan de manera desproporcionada a
las mujeres de comunidades rurales, indígenas y afrodescendientes, es crucial visibilizar y
respaldar sus luchas. Ellas no solo protegen la tierra, sino también nuestras esperanzas de
construir un mundo más equilibrado y justo.

Fuentes:

  • Día Internacional de las Mujeres Rurales, Naciones Unidas.
  • FAO, Empoderamiento de las mujeres rurales para erradicar la pobreza y el hambre
  • ONU Mujeres, El papel de las mujeres rurales en la resiliencia climática
Juana Francis Bone